Pink Lady (versión con leche evaporada)
Durante una de mis clases recientes de coctelería, trabajamos con Gin como base, y uno de los tragos que preparamos fue una versión particular del Pink Lady. Me tocó hacerlo a mí directamente en barra, lo cual fue una buena oportunidad para practicar lo aprendido y explorar un cóctel clásico desde un enfoque distinto.
El Pink Lady es un cóctel clásico que ha tenido muchas variantes a lo largo del tiempo. Originalmente incluía Gin, jugo de limón, applejack y clara de huevo, pero su versión más popular hoy suele ser una combinación de gin y granadina, con algún ingrediente cremoso o espumoso que le aporte cuerpo. En este caso, usamos leche evaporada como sustituto, logrando un trago suave y accesible.
Ingredientes
- 1.5 oz de gin
- 1.5 oz de leche evaporada
- 0.75 oz de jarabe de granadina
- Hielo
Preparación
- Añade todos los ingredientes en la coctelera con abundante hielo.
- Agita enérgicamente durante unos 10 a 15 segundos.
- Cuela en una copa coupé sin hielo.
- No lleva decoración. Aunque una pequeña flor comestible no queda nada mal.
Resultado y sensaciones
A pesar de no ser la versión clásica del Pink Lady, este cóctel resultó muy agradable: cremoso, balanceado y con un sabor suave. La leche evaporada se integró muy bien con la granadina, generando una textura homogénea y estable.
Visualmente fue un acierto: el color rosado intenso de la base contrastaba con una espuma más clara en la parte superior, lo que daba una presentación atractiva. La espuma quedó bien formada gracias al agitado firme.
La bebida fue servida en una copa coupé, lo cual aportó un toque elegante y permitió que la espuma se asentara bien, formando esa división sutil entre el cuerpo y la parte superior del cóctel.
Notas personales
Este trago me sirvió para seguir explorando cómo se comporta el Gin en recetas distintas a los clásicos secos o amargos. Aquí el perfil es completamente diferente: dulce, suave y visualmente atractivo.
No será la receta tradicional, pero fue una gran forma de entender el uso de la leche evaporada en coctelería y experimentar nuevas texturas. La repetiría en casa sin duda, ideal para sorprender a alguien con algo diferente y vistoso.